Didier Drogba se erige como emblema indiscutible del fútbol mundial. Su trayectoria, que se extendió a lo largo de casi dos décadas, constituye un monumento al talento bruto, entrega absoluta y una feroz ambición de triunfo. Desde su arrolladora irrupción en Francia hasta sus inmortales temporadas en el Chelsea, Drogba ganó la devoción de